poema a tus ojos

me acerco sublime hasta tu vida

y recorro la luna de tus ojos

y no hallo ni rastros de despojos

que hicieran en tu historia otros dias.

Es cierto que el sol aùn brilla claramente

que la mar no detiene su oleada

que la brisa aún acunalos sentidos

despertando la luz de la mirada.

Reconozco la estrella que tirita

el enjambre de hilos de la aurora

cuando tu mano danza silenciosa

sobre el torrente de mi cuerpo palpitante.

Y es entonces que te acercas silencioso

y tomas mi corázón, rojo de sangre

reviviendo el deseo inquieto y somnoliento

para beber el elixir de esta, mi vida.

Y recuerdo que en suño de Morfeo

eras angel y yo errante bagabundo

y no habia ni habra nada en el mundo

que pudiese opacar tal melodia.

Me acerco sublime y palpitante

y se abren las puertas de los cielos

y un historia pequeña, rica, silenciosa

que abarca cielos, infiernos e infinitos.

Y el mundo se inclina hasta la aurora

y sonrie con risas de amapolas

y recorro la luna de tus ojos

y son mis ojos los que brillan tu mirada.

y me acerco...Y te acercas...

y ya no hay nada....

O es quizas, que por fin... Ya hay un todo

Esperanza

Cuando la verdad se retira al olvido
Y las nuves hechan atardeceres
Cuando tomas la luna de la cintura
Y bebes de luces que han comulgado.
Cuando la espera se hace torre
De historias grises que se amontonan.
Cuando los soles se hacen de auroras
Sin sol de brillo y de tinieblas.
Se de mi vida la gota clara
Que se asemeja a mi destino
Y que al fin con la mañana
Llegues a mi como ese aire que necesito
Y nada de esto que aquí he escrito
aquiete el fuego de esta esperanza.

De hombres tristes

De hombres grises y tristes se viste el mundo a veces y todo tiene poco sentido.
La sombra es el reflejo obscuro, el paradójico retrato de ser solo eso... Una sombra.
Nada tiene demasiado porque estar, es estar por estar hasta que no se puede más
Con una pincelada de color bastaría para que todo cese y se retroalimentara de colores
Pero se desbasta y nada de eso ocurre. Es la tristeza hecha carne y huesos, muchos huesos
Se aniquilan las ideas y los optimismos mueren uno a uno hasta solo quedar el gris que todo lo puede
Que tristeza de luna muerta que silencio de sepulcro, que triste melancolía
De todo lo que no hay y se añora, rasguña el aire y solo encuentra vacios eternos y silenciosos
De hombre grises se viste la propia tristeza y se hace hombre y carne y hueso y todo es melancolía.
Destierra el corazón, la tristeza y la sin razón impera.
Todo se oculta tras un manto que cubre colores y se hace vacio que nada es capaz de llenar.
Dejadme escurrir una lagrima para que el mundo vuelva a ser un desierto pero con una lagrima.
Dejadme ser el guardián del dolor y el señor de los colores que no hay.
Tomad mi sangre y pintad con ella al sol, dejad que cielo se tiña con mis ojos.
Con las ventanas de mi pecho filtrare el aire hasta hacerla brisa que limpia y refresca, con mi sueños construiré escaleras que den de frente a la vida.
Y sere la ultima osadía del último hombre que nace y no muere sino se hace viento.
Tomad mi mano y yo rescatare el cielo de los manantiales secos y las hare mías.
Dadme un algo de todo y lo hare tanto como el infinito me lo permita.
Seré el color del hombre que cae y se levantan y seré ala y sueño
Seré como la aurora de un último amanecer y brillare tanto como la luz me tome
Y gritare con vos de amaneceres y seré simple y tanto como quiere la historia ser y dejare mi nombre
marcado al amanecer y ya con eso no habrá grises....y
No habrá los insabores y todo será dulce y mi sangre será el sello que lamerán los colores del cielo y de la tierra
para así ser y por siempre sueños, tras sueños que pintara de grises a colores sin mediar con la razón
Y habrá corazón y cielos y nada será lo que fue solo por que yo me hice presente.